En ese momento, Messi ingresó como sustituto y, aunque su actuación fue discreta, esos breves ocho minutos representan el inicio de una de las carreras más brillantes en la historia del deporte. A lo largo de sus 20 años en el fútbol profesional, Messi ha acumulado una impresionante serie de logros que incluyen ocho Balones de Oro, cuatro títulos de la UEFA Champions League, un Mundial de la FIFA y numerosos récords de goles y asistencias.
Para conmemorar este aniversario, ESPN ha clasificado las temporadas de Messi del lugar menos al más destacado, considerando no solo sus estadísticas de goles, sino también sus contribuciones individuales y los éxitos colectivos. Sorprendentemente, la temporada en la que Messi tuvo su mejor rendimiento individual no ocupa el primer lugar en esta lista. A pesar de haber enfrentado altibajos, cada temporada ha contribuido a forjar su legado, mostrando un crecimiento constante desde sus inicios como un prometedor adolescente hasta convertirse en una leyenda del fútbol.
Las primeras temporadas de Messi se caracterizaron por una mezcla de inexperiencia y momentos de genialidad. En particular, la 2006-07 fue significativa, donde se destacó al anotar un hat-trick contra el Real Madrid, aunque el equipo no logró títulos importantes. Con la llegada de Pep Guardiola, Messi se transformó en el eje del equipo, llevando al Barcelona a la gloria, lo que culminó en la temporada 2008-09 con un histórico triplete que incluyó la Champions League. En años posteriores, incluyendo la famosa campaña 2011-12, Messi estableció récords de goles que aún perduran en la memoria de los aficionados.
En sus años más recientes, Messi ha seguido dejando su huella, aunque a veces en clubes diferentes. Tras una emotiva salida del Barcelona, debutó con el Paris Saint-Germain en una temporada marcada por más éxitos, incluyendo la Copa del Mundo de 2022. En la actualidad, continúa su carrera en la Major League Soccer con el Inter Miami, donde, pese a un contexto diferente, sigue demostrando su talento excepcional. De este modo, Messi sigue expandiendo su legado, siendo considerado no solo uno de los mejores futbolistas de todos los tiempos, sino también un ícono global del deporte.
