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Correr despacio para ser más rápido. Lo que aparentemente parece un sinsentido es la base de los denominados splits negativos, una estrategia basada en el ritmo de la que probablemente habrás oído hablar. Sin embrago, vaya por delante que, aunque eficaz y adaptable prácticamente a cualquier distancia, no todo el mundo la domina porque es necesaria mucha experiencia y un elevado conocimiento de nuestras propias posibilidades y circunstancias.
Básicamente, como decíamos, los splits negativos son una estrategia que consiste en correr la segunda mitad de una carrera más rápido que la primera. El objetivo es empezar más despacio que el ritmo objetivo e ir aumentando gradualmente la velocidad. Aunque es bastante más habitual que suceda justo lo contrario.
“En los Splits Negativos el corredor divide la carrera en dos mitades y corre la segunda más rápido que la primera. Esta estrategia ha sido muy utilizada entre los atletas que han establecido récords mundiales y nacionales en distancias que van desde los 1.500 metros hasta el maratón”, explica Carlos Rojo.
Y es que, este corredor aficionado, experto en equipamiento y rendimiento deportivo aplicado al running y creador de contenido en redes sociales, asegura que se trata de una estrategia “eficaz”. “Permite al corredor conservar energía durante la primera mitad de la carrera y luego utilizar la energía reservada para acelerar hacia el final”, asegura.
No obstante, Rojo explica que a pesar de la evidencia que apoya los splits negativos, un desafío significativo es “la dificultad de aplicar esta estrategia correctamente” en una carrera real. “Muchos corredores amateurs, incluso sabiendo que esta podría ser la estrategia óptima, fallan al aplicarla porque comienzan la carrera de manera demasiado conservadora o, por el contrario, demasiado agresiva. Esto lleva a no alcanzar su potencial completo, ya que no logran calibrar su esfuerzo de manera eficiente a lo largo de la carrera”, indica.
La recomendación de este experto es que en pruebas de 10 kilómetros hasta maratón se intente salir un “puntito menos en relación al ritmo objetivo”. “Me refiero a 2-3 segundos el kilómetro, muy poquito. Poco a poco ve cogiendo el ritmo objetivo para poder luego acabar fuerte”, comparte.
No obstante, Carlos Rojo señala que es una estrategia que no es para todo el mundo. “Aunque los atletas de élite pueden beneficiarse de los splits negativos, no todos los corredores amateurs deberían intentar replicar exactamente estas estrategias sin considerar sus propias capacidades y condiciones de carrera. Los splits negativos requieren un alto grado de autoconocimiento y control durante la carrera, cualidades que se desarrollan con experiencia y entrenamiento específico”, concluye el experto.
Con planes de entrenamiento, notificaciones y seguimiento del bienestar
Otros factores que influyen
Además, también es preciso dominar todo lo referente a la nutrición dentro de la propia competición ya que puede ser necesario ‘repostar’ pronto y a menudo, antes de sentir la necesidad real, lo que ayuda a mantener el glucógeno constante y hace posible que el cuerpo tenga la energía que necesita para aumentar el nivel de exigencia en la segunda mitad de la carrera.
Pero una vez más, conviene no aventurarse sin haber probado la estrategia en entrenamiento, que y sin estar plenamente convencidos de que se ajusta a nuestras posibilidades. Y desde luego hay que conocer el recorrido -perfil y desniveles- o las condiciones atmosféricas, circunstancias que pueden hacer saltar por los aires nuestra estrategia de splits negativos.
En definitiva, elegir cómo queremos afrontar una carrera depende, como hemos visto, de varios factores y, en última instancia optar por los splits negativos o por cualquier otra estrategia debe responder única y exclusivamente a una cuestión de propia comodidad. Corre como mejor te sientas.
Álvaro Piqueras es experto en deportes y en el último lustro se ha especializado en fitness, nutrición y otros temas de salud. Trata de mantenerse al día en lo que se refiere a nuevas investigaciones y tendencias de los campos que domina para poder compartir con rigor la rutina de entrenamiento que puede inspirar un cambio en tus hábitos, las propiedades de los alimentos que deberían formar parte de tu dieta o los hallazgos científicos que pueden mejorar el bienestar físico y mental de personas como tú.
Comenzó su trayectoria en medios locales y regionales de la tierra de Don Quijote, concretamente en Albacete. De ahí dio el salto a medios de ámbito nacional tras un enriquecedor paso por una maravillosa agencia de publicidad independiente con nombre de canción de los Beatles (GettingBetter), aunque siempre mantuvo intacta su vocación periodística.
De ahí que persiguiera su sueño de trabajar para alguno de los principales grupos editoriales del país como Prisa, Vocento y ahora también Hearst. Quizá le hayas leído en la versión digital del Diario As, abordando infinidad de temáticas, o en ABC y otras cabeceras y revistas del grupo elaborando reportajes de branded content para grandes marcas, multinacionales e instituciones. Y si no has tenido la ocasión, este es el momento de hacerlo en Men’s Health y Runner’s World.
Como no podía ser de otra forma, confiesa ser un amante de la práctica deportiva y desde muy pequeño ha probado con disciplinas tan dispares como atletismo, fútbol, baloncesto, tenis, ciclismo o natación. Unas veces sintiendo la adrenalina de la competición, y otras simplemente disfrutando de los beneficios de la actividad física. Ahora le ha dado por los ejercicios funcionales y el boxeo porque tiene la certeza de que el saco es incapaz de devolverle los golpes.
Licenciado en Publicidad y Relaciones Públicas por la Universidad de Alicante, también posee formación específica en gestión y dirección de RRSS, planificación estratégica y diseño gráfico. Últimamente se ha adentrado en el universo de la inteligencia artificial generativa aplicada al periodismo, pero jura y perjura que no la emplea profesionalmente porque, entre otras consideraciones, sigue disfrutando de cada palabra que escribe tras 20 años de experiencia en el sector de la comunicación.
