El sospechoso “se creyó la retórica de Biden y Harris, y actuó en consecuencia”, aseguró el candidato republicano Donald Trump en declaraciones a la cadena Fox News. Ryan Wesley Routh, detenido tras ser avistado por el Servicio Secreto que protegía a Trump, fue acusado de posesión ilegal de armas durante su comparecencia inicial. El sospechoso no llegó a disparar, según las autoridades.
Para Donald Trump, está claro, el segundo intento de asesinato en su contra en dos meses obedece al discurso del presidente Joe Biden y de su vicepresidenta y candidata demócrata a la Casa Blanca, Kamala Harris.
Según el exmandatario, el sospechoso “se creyó la retórica de Biden y Harris, y actuó en consecuencia”, declaró Trump a Fox News. “Su retórica está provocando que me disparen”, añadió.
Biden, que da “gracias a Dios” de que Trump esté ileso, se defendió: “Siempre he condenado la violencia política. Siempre lo haré”.
Los estadounidenses resuelven sus diferencias “pacíficamente en las urnas, no a punta de pistola”, recalcó en Filadelfia (este), horas después de pedir “más ayuda” para el Servicio Secreto, la policía de élite encargada de la protección de las personalidades políticas. Kamala Harris se declaró consternada por lo sucedido en Florida.
El secretario de Justicia y fiscal general, Merrick Garland, prometió este lunes desplegar “todos los recursos disponibles” para investigar los hechos.
En la red social X, el jefe republicano de la Cámara de Representantes, Mike Johnson, consideró prioritario “tener respuestas para comprender cómo el presidente Trump pudo haber sufrido varios intentos de asesinato”.
El domingo por la tarde Trump estaba en su club de golf en Florida cuando se escucharon “disparos” cerca, según su equipo.