Cada año, miles toman esta ruta traicionera, cruzando a pie la frontera entre México y Estados Unidos por el desierto de Sonora. Esta región remota carece de refugio y servicios básicos, y está a varias horas del hospital más cercano. Nos unimos a organizaciones locales para evaluar las necesidades médicas y humanitarias de esta población.
Con el fin de evaluar las necesidades humanitarias de las personas migrantes y solicitantes de asilo que cruzan la frontera entre México y Estados Unidos por el desierto de Sonora, hemos colaborado temporalmente con organizaciones sin ánimo de lucro de Tucson.
Cada año, miles de personas migrantes y solicitantes de asilo toman esta ruta, cruzando a pie la frontera sur de Estados Unidos hacia los condados de Pima y Santa Cruz, en Arizona, a través del desierto de Sonora. Se trata de una ruta traicionera a través de una región remota sin refugio ni servicios básicos, y a varias horas del hospital más cercano.
Las personas atraviesan un terreno muy accidentado en el que las condiciones meteorológicas pueden ser extremas: temperaturas nocturnas gélidas en invierno y calor abrasador y lluvia en los meses de verano. Las intensas condiciones las exponen a un alto riesgo de muerte por diversos factores, como congelación, calor, deshidratación, esfuerzo físico y exposición.
A menudo, los guías dejan a estas personas en distintos puntos cercanos al muro fronterizo en el desierto de Sonora y les dicen que allí pueden entregarse a la Patrulla Fronteriza para solicitar protección en Estados Unidos, pero esto no es cierto.
De hecho, deben caminar durante horas por terrenos extremos para llegar a la estación de la Patrulla Fronteriza más cercana, o esperar durante horas, hasta que puedan ser recogidos por ella.
Nuestro pequeño equipo, formado por una coordinadora de proyecto, un médico y un trabajador social, estuvo dos semanas trabajando junto a Humane Borders y otros grupos sin ánimo de lucro para evaluar las necesidades médicas de la región y sugerir formas de crear capacidad para aumentar los servicios y la colaboración.
Estas imágenes muestran algunos momentos de un problema humanitario que sin duda exige más urgencia y recursos.
