Por una cuestión vinculada netamente a las grandes dimensiones, Estados Unidos tiene diferentes climas en cada región. En ese contexto, los que residen en el Noreste del país norteamericano deben estar alertas a lo que ocurrirá en las próximas horas, contemplando que -tras una intensa ola de calor- se prepara para enfrentar condiciones climáticas severas este domingo. Una zona frontal que atraviesa el aire cálido y húmedo está generando tormentas que podrían volverse peligrosas, con riesgos de granizo, vientos dañinos e incluso tornados.
El Centro de Predicción de Tormentas no se toma descanso y en el corriente fin de semana tiene mucho trabajo. Sin ir más lejos, con el afán de combatir un posible foco de peligro, lanzó una alerta para 54 millones de estadounidenses, señalando un riesgo leve de tormentas severas. En partes de cinco estados, el peligro se eleva a un Nivel 3 de 5 en la escala.
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A la hora de hacer un desglose y sectorizar los posibles focos de peligro, es necesario remarcar que el riesgo es particularmente alto en New Hampshire, donde comunidades como Concord y Keene tienen un 10% de probabilidades de experimentar un tornado en un radio de 25 millas. Además, vale destacar que los tornados son poco frecuentes en esta región, con un promedio anual de uno o dos por estado. En tanto, ciudades importantes como Nueva York y Boston se encuentran en un riesgo menor (Nivel 2), pero aún podrían enfrentar ráfagas de viento dañinas.
Debido a su infrecuencia, muchas comunidades no cuentan con sirenas de alerta, por lo que se insta a los residentes a activar las notificaciones en sus teléfonos móviles, aplicaciones y otros sistemas de emergencia.
Perspectiva climática
Se espera que las precipitaciones significativas terminen durante la noche del domingo, mientras el frente frío se desplaza hacia el mar, despejando la región para el lunes en la mañana. A diferencia de otros frentes, este traerá un notable descenso en las temperaturas, bajando las máximas diarias entre 10 y 20 grados. Esta disminución brindará un respiro temporal del calor, ajustando las temperaturas a valores más cercanos al promedio, e incluso por debajo de los niveles típicos del verano en algunas áreas.
No obstante, el alivio será breve, ya que se prevé que las temperaturas vuelvan a subir a valores normales o superiores a mediados de la semana.