50 años. Esta es la edad media de la plantilla del Ayuntamiento de Zaragoza, donde cada año se jubilan alrededor de 120 personas. Unas plazas que el consistorio va cubriendo al ritmo que le permite la tasa de reposición y que en los últimos años ha centrado sus esfuerzos en reforzar especialmente al Cuerpo de la Policía Local.
Con 4.930 trabajadores, más de la mitad (68%) son hombres, un porcentaje que se desvirtúa principalmente por la baja representación de las mujeres en los cuerpos de Bomberos y Policía Local. En el servicio de extinción de incendios apenas representan el 2%, un porcentaje que se eleva hasta el 15% en el caso de la Policía, donde cada vez hay más mujeres. Al margen de estas dos secciones, la igualdad está presente en el consistorio, con un reparto del 50%, aproximadamente, que varía según la concejalía que se mire.
De estos cerca de 5.000 trabajadores, solo el 2% son personal laboral, asociados principalmente al área de Acción Social. En cuanto al número de altos cargos, además de los 31 concejales que forman la corporación, hay 41 trabajadores eventuales y 14 directivos, como coordinadores de área y directores generales. Por categorías, casi la mitad (el 48%), son C1, y los C2 el 26%, mientras que los de alta cualificación A1 y A1, representan el 18%. Por áreas, Seguridad Ciudadana, Urbanismo y Políticas Sociales son las que más personal aglutinan.
Plazas libres
Actualmente, el 84,4% de los puestos están ocupados por funcionarios. Un porcentaje que una vez que finalicen las Ofertas de Empleo Público (OEP) que están en marcha ascenderá hasta el 91,5%, según las previsiones del concejal de Personal, Alfonso Mendoza, que adelanta que este año están previstas 118 jubilaciones, que crecerán hasta las 130 en 2026. Aunque la plantilla está «rejuveneciéndose» poca a poco y se trabaja con el objetivo de ocupar todas las plazas, desde que el PP llegó a la Alcaldía en 2019 se ha reducido ligeramente, pasando de los 5.154 a los 4.980 actuales (-224). Ese año, en 2019, la edad media era de 52,4 años, dos más que en la actualidad.
La estrategia del equipo de Gobierno de Natalia Chueca no es otra que «cada área pueda contratar y cubrir cada plaza vacante». Un propósito, no obstante, limitado por la tasa de reposición que en su día diseñó y puso en marcha el conservador Cristóbal Montoro. Lo que sí se ha logrado ha sido reducir drásticamente la tasa de temporalidad. Una exigencia impuesta por la Justicia que obligó a las administraciones públicas a actuar con rapidez. En el caso de la casa consistorial, se ha pasado tener un 20% de empleados en situación temporal en 2029 a solo un 1,3% en la actualidad. Es más, Mendoza apunta que, además, en el caso del consistorio zaragozano, de las 405 plazas estabilizadas, el 99% han sido ocupadas por interinos de la propia casa consistorial.
Con el ánimo de cubrir las jubilaciones previstas para los próximos años, Mendoza explica que se han marcado un nuevo objetivo: que las Ofertas de Empleo Público (OEP) se ejecuten en el mismo año de su publicación para agilizar los procesos. «Queremos establecer esta condición en las bases este 2025 o, como tarde, en 2026», explica.
El presupuesto municipal contempla para este año hasta 284 millones de euros para hacer frente al mantenimiento de la plantilla, suponen casi un tercio del total, que roza los 1.000 millones este año ( 978.251.443 euros), aunque todavía está pendiente de su aprobación definitiva, el próximo mes de febrero.